La criptozoología es una pseudociencia y subcultura que se dedica al estudio de animales cuya existencia no está científicamente comprobada, incluyendo especies extintas, mitológicas o folclóricas. Los animales investigados, llamados "críptidos", abarcan desde dinosaurios no aviares hasta criaturas legendarias como Pie Grande, el chupacabras o el monstruo del lago Ness. Esta disciplina, fundada en los años 1950 por Bernard Heuvelmans e Ivan T. Sanderson, se caracteriza por rechazar los métodos científicos convencionales y tener afinidades con otras pseudociencias como la ufología y la caza de fantasmas.
El término "criptozoología" fue acuñado por Heuvelmans, quien definió esta área como el estudio de animales con evidencia circunstancial o testimonial insuficiente para la zoología tradicional. Su obra de 1955, "Sur la piste des bêtes ignorées", es considerada la base de esta disciplina, aunque sus orígenes se remontan a trabajos anteriores como los de Antoon Cornelis Oudemans. Heuvelmans promovió una práctica que combinara rigor científico con apertura interdisciplinaria, prestando especial atención a las tradiciones y creencias populares, que aunque a menudo fantásticas, podrían contener verdades útiles para la investigación.
A lo largo del tiempo, la criptozoología ha atraído a diversos autores y aficionados, generando una cultura popular que incluye páginas web, películas, museos y programas de televisión dedicados a estos misterios. Sin embargo, la criptozoología ha sido objeto de numerosas críticas. Se le acusa de modificar características de seres mitológicos para hacerlos encajar con animales extintos, de no haber descubierto pruebas científicas convincentes de críptidos, y de sostener creencias sin someterlas a falsificación científica. Además, se señala que muchas explicaciones ad hoc se utilizan para justificar la ausencia de evidencias, y que la disciplina viola normas científicas y de nomenclatura zoológica.
Entre los críptidos más conocidos se encuentran criaturas acuáticas como el monstruo del lago Ness y el pulpo gigante, así como terrestres y humanoides como el mapinguarí, sirenas, chupacabras, Orang Pendek, Pie Grande y el Yeti. También existen criaturas consideradas pseudocriptozoológicas, que no cumplen con los criterios para ser estudiadas dentro de esta disciplina y que a menudo se relacionan con la parapsicología. La criptozoología, a pesar de su falta de reconocimiento científico, sigue siendo un campo de interés popular y cultural, con un enfoque en la búsqueda de pruebas definitivas para confirmar o descartar la existencia de estas especies misteriosas.
| Autor: | Bernard Heuvelmans |
| Editorial: | Luis de Caralt |
| Año: | 1955 |
| Números: | 3 |
| Género: | Pseudociencia, Criptozoología |
| Idioma: | Español |
| Leer en: | Urban Monsters – Doncomic |