La narración oral en Cuba es una manifestación cultural rica y diversa que surge de la confluencia de múltiples tradiciones y herencias culturales. Esta práctica tiene sus raíces en la cultura precolombina, aunque con escasas huellas orales, y se enriquece con la influencia española tras 1492 y la introducción de mano de obra esclava africana, que aportó una variedad de ritos, mitos, costumbres y ceremonias orales que forman parte integral de la tradición espiritual cubana.
Además, la narración oral cubana se ve influida por las oleadas migratorias de chinos, árabes, judíos, europeos, estadounidenses, japoneses y franceses provenientes de Haití, quienes aportaron sus propias historias y cosmovisiones. La interacción entre tradiciones negras y la tradición judeocristiana occidental, junto con las expresiones culturales de los emigrantes españoles —principalmente canarios, andaluces, castellanos y gallegos—, contribuyó a la multiculturalidad que caracteriza la narrativa oral en Cuba.
Entre los siglos XV y XIX se consolidaron estas diversas herencias culturales, dando origen primero a lo criollo y posteriormente a lo propiamente cubano. En el siglo XX, influenciado por experiencias estadounidenses como "La Hora del Cuento", se promovieron iniciativas de narración oral artística con fines pedagógicos y artísticos en escuelas y bibliotecas, dando lugar a un movimiento conocido como “liceísmo” o “corriente escandinava”.
Destacan figuras como Haydeé Arteaga, pionera en la narración oral comunitaria y sindicalista, y Luis Mariano Carbonell, quien en 1956 estrenó un espectáculo que se considera una primera aproximación a la narración escénica de cuentos. Sin embargo, fue en los años setenta cuando Francisco Garzón Céspedes renovó el arte de contar cuentos, desarrollando la narración oral escénica contemporánea y fundando espacios como La Peña de los Juglares y La Peña del Brocal, que integraron diversas artes y fomentaron la oralidad escénica.
Actualmente, en Cuba conviven varias generaciones de narradores orales, desde los pioneros hasta alumnos formados en talleres y proyectos en diferentes regiones del país. Existen espacios y eventos dedicados a la práctica, desarrollo e investigación de la oralidad popular y artística, reflejando la diversidad de formas de narración oral que van desde la cuentería popular hasta la narración oral escénica contemporánea.
El reconocimiento institucional de esta tradición se evidencia en la existencia de entidades como la Cátedra Iberoamericana Itinerante de Narración Oral Escénica (CIINOE), la Sección de Narradores Orales de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), y varios foros y cátedras dedicados a la narración oral, que garantizan la continuidad y promoción de esta expresión cultural en la actualidad.
| Autor: | — |
| Editorial: | — |
| Año: | — |
| Números: | 2 |
| Género: | Narración oral, Tradición cultural, Narración escénica |
| Idioma: | Español |
| Leer en: | Cuentos Andaluces y Cuentos Judios – Doncomic |